por Mariana Vargas
Querido Padre,
Te escribo ya que he estado preocupada en los últimos días, la angustia de no saber qué estoy haciendo con mi vida, sentir que estoy perdiendo tiempo, que la oportunidades se me van de las manos, y llevar el peso encima de que no te has decidido a ayudarme.
Reconozco, después de tanto tiempo, que no es lo que tenías planeado para mí, y siento defraudarte, pero esto es darme un paso a mi misma, entiendo tu pesar por mí, pero no significa qué esté de acuerdo contigo. Me niego a casarme. Aunque esperas que mis razones se basen en él, su actitud, su trabajo y demás, no es así. No deseo pasar el resto de mi vida con él por una sola razón, no creo que la vida me tenga preparado algo tan pequeño, en el fondo sé que yo estoy hecha para realidades más grandes. Por lo que creo y por lo que estoy dispuesta a vivir. No quiero estar detrás de sus negocios, no quiero ser la cara social frente a la compañía, no quiero tener que vestirme como todas las esposas de sus colegas, con los sombreros emplumados, y el busto escotado, ni mucho menos llegar a hablar en el tono que a él le apetece.
Sólo quiero estudiar, trazar mi propio camino, hacer las cosas bien, pero a mi manera. No sé que reacción tendrás a ésta carta. Solo sé que la escribo teniendo algo de fe en ti, tal vez la única persona de la que aún espero algo. Mándale mis saludos a mamá, han pasado cinco meses y cada segundo la extraño más, recuérdale nuestros besos de mariposa, ella entenderá.
Te pido, con los ojos que te suplicaban un abrazo, que permitas mi entrada a la universidad. Solo debes responder una de las muchas cartas que te han enviado, es solo una firma de tu parte.
Me acordé de ti, por eso me decidí a escribirte. El otro día buscando trabajo entré al hotel Astoria Waldorf, mientras la recepcionista me indicaba la oficina del gerente, y entre tantas revistas de la sala de espera, encontré la última edición de Vogue, recuerdo que a mamá le encantaba, pero eso no era lo importante. De lo que quería hablarte era su portada, era casi un retrato de Giles, fue muy extraño para mí, pero era verlo en una pintura, una portada de una revista, de nuestro pavo real, fue ver a Giles con una mujer en su costado. Una mujer como la que quisieras que yo fuera. Y me imaginé, un domingo en la casa y la sorpresa de que hablas vuelto a llamar a Alfredo, si no recuerdas su nombre, era el quien nos retrataba cada fecha especial. Entonces los veía emocionados, cómo si la boda fuera próxima y sus sueños, también tuyos, estuvieran hechos realidad.
Y de vuelta a mi realidad, me di cuenta que no quiero eso. Sobre todo por que Giles no hubiera estado de acuerdo. Él siempre está en paz, paseándose en el atardecer. Era el igual a ustedes, y desgraciadamente te tienes que conformar con que un animal sea el único en seguir tus pasos.
Tu hija
Querido Padre,
Te escribo ya que he estado preocupada en los últimos días, la angustia de no saber qué estoy haciendo con mi vida, sentir que estoy perdiendo tiempo, que la oportunidades se me van de las manos, y llevar el peso encima de que no te has decidido a ayudarme.
Reconozco, después de tanto tiempo, que no es lo que tenías planeado para mí, y siento defraudarte, pero esto es darme un paso a mi misma, entiendo tu pesar por mí, pero no significa qué esté de acuerdo contigo. Me niego a casarme. Aunque esperas que mis razones se basen en él, su actitud, su trabajo y demás, no es así. No deseo pasar el resto de mi vida con él por una sola razón, no creo que la vida me tenga preparado algo tan pequeño, en el fondo sé que yo estoy hecha para realidades más grandes. Por lo que creo y por lo que estoy dispuesta a vivir. No quiero estar detrás de sus negocios, no quiero ser la cara social frente a la compañía, no quiero tener que vestirme como todas las esposas de sus colegas, con los sombreros emplumados, y el busto escotado, ni mucho menos llegar a hablar en el tono que a él le apetece.
Sólo quiero estudiar, trazar mi propio camino, hacer las cosas bien, pero a mi manera. No sé que reacción tendrás a ésta carta. Solo sé que la escribo teniendo algo de fe en ti, tal vez la única persona de la que aún espero algo. Mándale mis saludos a mamá, han pasado cinco meses y cada segundo la extraño más, recuérdale nuestros besos de mariposa, ella entenderá.
Te pido, con los ojos que te suplicaban un abrazo, que permitas mi entrada a la universidad. Solo debes responder una de las muchas cartas que te han enviado, es solo una firma de tu parte.
Me acordé de ti, por eso me decidí a escribirte. El otro día buscando trabajo entré al hotel Astoria Waldorf, mientras la recepcionista me indicaba la oficina del gerente, y entre tantas revistas de la sala de espera, encontré la última edición de Vogue, recuerdo que a mamá le encantaba, pero eso no era lo importante. De lo que quería hablarte era su portada, era casi un retrato de Giles, fue muy extraño para mí, pero era verlo en una pintura, una portada de una revista, de nuestro pavo real, fue ver a Giles con una mujer en su costado. Una mujer como la que quisieras que yo fuera. Y me imaginé, un domingo en la casa y la sorpresa de que hablas vuelto a llamar a Alfredo, si no recuerdas su nombre, era el quien nos retrataba cada fecha especial. Entonces los veía emocionados, cómo si la boda fuera próxima y sus sueños, también tuyos, estuvieran hechos realidad.
Y de vuelta a mi realidad, me di cuenta que no quiero eso. Sobre todo por que Giles no hubiera estado de acuerdo. Él siempre está en paz, paseándose en el atardecer. Era el igual a ustedes, y desgraciadamente te tienes que conformar con que un animal sea el único en seguir tus pasos.
Tu hija
Referencias:
María López Linares, 3 de Septiembre de 2012, “Los 120 años de la historia de Vogue”. Obtenido de:
http://blog.lopezlinares.com/2012/09/03/historia-de-vogue/
Daniela Ceccato,16 de Mayo de 2008, La historia de Vogue: la revista de moda y estilo más relevante del mundo. Obtenido de: http://centromujer.republica.com/moda/la-historia-de-vogue-la-revista-de- moda-y-estilo-mas-relevante-del-mundo.html
Autor desconocido, 7 de Junio de 2011, LA HISTORIA EN PORTADAS. PRIMERA PARTE. Obtenido de: https://loquelvientosedejo.wordpress.com/2011/06/07/la-historia-en-portadas-primera- parte/
Daniela Ceccato,16 de Mayo de 2008, La historia de Vogue: la revista de moda y estilo más relevante del mundo. Obtenido de: http://centromujer.republica.com/moda/la-historia-de-vogue-la-revista-de- moda-y-estilo-mas-relevante-del-mundo.html
Autor desconocido, 7 de Junio de 2011, LA HISTORIA EN PORTADAS. PRIMERA PARTE. Obtenido de: https://loquelvientosedejo.wordpress.com/2011/06/07/la-historia-en-portadas-primera- parte/
%2FPage%2FPLEC_contenidoFinal&vest=1343065588916
No hay comentarios:
Publicar un comentario