lunes, 14 de abril de 2014

Conversaciones imposibles


Por: Camila Zuluaga Barrera
No tendré alma pero tengo elegancia




Conversación entre Coco Chanel y Agatha Ruiz de la Prada

A: ¡El color lo cambia todo! 
C: Pero qué dices, Agatha, el color le da un sentido completamente diferente a una persona, sus sentimientos, su estilo, su elegancia, el blanco y negro son los únicos colores que se deberían combinar
A: ¿Tú estás loca? El color da vida, da más sentimientos de lo que podría dar un simple blanco y negro, da libertad. 
C: Sí claro, libertad para criticar tantas cosas en una. La simplicidad es la clave para encontrar el refinamiento que una persona necesita, en este caso lo que una mujer necesita, ya hay mucha libertad sin tener el corsé puesto a todo momento, debemos lograr cerrar un poco más esa libertad para que solo exista clase y elegancia. 
A: ¿Corsé? Será en tu época, ahora todo el mundo hace, piensa, dice y actúa como quiere, hace tiempos que la mujer pudo cambiar su forma de reflejarse en el mundo, estamos en la época en que se puede divertir y arriesgarse con sus prendas. 
C: Claro que yo sé qué es divertirse, eso lo he hecho y en una época en la que no era tan bien visto 
A: Sí, bastantes cosas se han comentado de ti y yo de ti las dejaría en tu memoria, hablemos del color, de las texturas, de los estampados, de los juegos con la ropa.
C: claro, claro ¿Estás citando el vestuario de una compañía de circo cierto? Es la única manera en la que tantas cosas y colores con texturas y estampados se unirían.. A: Pero qué dices, estoy hablando de mi nueva colección para primavera.

A: En España, de donde vengo, la libertad así como la lucha de la mujer por sobresalir siempre han estado presentes 
C: Eso lo sé, ¿no crees que en Francia durante la guerra era todo muy difícil? Fue el momento en que la mujer pudo trabajar y es ahí donde cada una de las diseñadores que existíamos tuvo la oportunidad de sobresalir y hacerse un espacio en el mundo, yo conozco de esa lucha y eso no me da el permiso de crear prendas sin sentido, solo basándome en el carnaval y los colores sin combinación alguna. 
A: Qué equivocada estás, si entendieras que cada una de mis piezas están pensadas minuciosamente y elaboradas en meses para poder crear un orden en todo ese "desorden" del que tú estás hablando, es importante entender la función de cada color en las prendas para así llenarlas de sentimiento e historia. Las cosas no son poner por poner, no creo tampoco que tú hayas sido muy creativa al escoger sólo dos tonos en tu paleta de colores, tal vez tu alma fría y sin alegría (sí Chanel, todos sabemos que eres huérfana y la vida no ha sido color de rosa para ti) no te ha permitido crear esa alegría que una prenda debería transmitir. 
C: No tendré alma pero tengo elegancia. 
A: Yo tampoco tengo alma, la entrego toda a mis diseños. 
C: Deberías replantear a quién están dirigidas tus prendas, es importante saber que lo que creas no es para usar en la calle, yo doy comodidad, elegancia, prendas que día a día harán de la mujer algo imponente y clásico. 
A: lo bueno de lo que hago es que cada quien utiliza las cosas cuando quiera en cualquier momento, no les estoy exigiendo que las usen en cierta oportunidad específica, las mujeres que las usarán son tan libres como las prendas; mi línea ha crecido y estoy diseñado muchas cosas más, lo cual me permite crear un estilo de vida alegre y colorido que muchos en esta época de recesiones y  guerras quisieran tener. 
C: mi marca, con ahora ya 100 años de legado, sabe lo que hace y lo hace bien, como consejo creo que unos colores más decentes resaltarían tu belleza y estarían más acordes con esos años que ya tienes.
 A: a ti también un poco de color te ayudaría a darle luz a tu vida. 
C: No existe nada más que el blanco y el negro
.A: los colores dan la vida, ¿negro? Negro en mi funeral.

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